Candles

I found our first Diptyque candle inside one of the boxes. It was covered with big green bubble wrap. I fought with it and the transparent tape to get to that elegant crystal glass. A rush. That smell that oblige me to walk three steps back. And my weepy eyes closed. My mind forcing them to remember the sex we made under that candle’s spell. And the dinners we had in that bed. And the movies we watched under the light of that candle. The fragance. And the covers. And the window. And the pillows. And the small wooden floor full of her clothes when I wasn’t folding these and placing them in the chair. And the candle burning, facing a table full of papers, deadlines, our two computers. And the books. And then us. Burning altogether.

I held the candle in my hands so strongly I though I was going to break it. And then I put it back inside the big green bubble wrap rapidly. Back again inside the bottom of the box. I need to protect that smell. A sacrilege without her.

I remember the day I bought it. I arrived home. She was working in the kitchen table with a colleague on the socialist’s candidate documentary. What a beautiful gift I had made to both of us. What a luxurious night. I specifically asked the sales assistant for a sexy smell. Our first Diptyque candle witness of our souls.

Pasar página moderno

Para escribir sobre el libro de Leticia he puesto don't know why de Norah Jones. Leticia es dulce como esta canción. La llamaré Leticia y no Leti como lo he hecho toda la vida con Gabriela y no Gabi.

"Olivia. No Oli, ni Olive, ni O. Olivia, con una ligera reafirmación en las letras del medio creando un centro de gravedad en una palabra antes oscilante".

Leticia y yo compartimos sensibilidad.

Scrolling After Sex es un libro que huele a adicción y a cosa bien hecha. Soy de las que doblan un poquito las páginas de los libros, por arriba o por abajo, dependiendo de donde quede mas cerca el pedazo que me ha llamado la atención. Con Scrolling After Sex no he podido hacerlo porque las páginas son entidades muy bien editadas. Hasta cuenta con seda negra y dibujos mágicos.

"One of the hardest things for humans to accept is that almost everything in life is just about timing."

En Scrolling After Sex encontramos el descubrimiento de convertirse en mujer de una chica bien de San Gervasio. Hay tantos detalles y notitas escondidas y fotografías que una lo revive con la autora, venga de donde venga, mientras entienda las lenguas. 

Scrolling After Sex es una oda al amor en mayúsculas, rosa, subrayado y garabateado.

Como no he doblado pedacitos de página porque este libro es un diario objeto, no me acuerdo de aquellos pasajes en específico. Es como mirar Call Me By Your Name e intentar parar la cinta en un momento determinado, ahora.


Foto de Vogue


Pruébalo. Te acuerdas del todo, pero no de la palabra. Ves la imagen; como Leticia con lágrimas perladas en la contraportada, fotografiada por la amada amiga. Como el lomo blanco cuando lo destapas. Como la foto de su padre caminando por un pueblecito seguramente francés. Pero no recuerdas una palabra concreta. 


Decido releerla. Scrolling After Sex te permite este lujo.

Leticia asegura que "somos la generación de tecnologías pero que todavía se nos da un poco mal" y no podría asentir más. Me encantaría volver al 932801775 o al 934187173, por ejemplo, a tí no?. 


La voracidad de antaño es la misma pero es que ahora tenemos muchas mas distracciones.

Leticia escribe relatos como el genial Scrolling after test y El resto es electricidad y se pregunta si nos inventaremos una memoria externa para traspasar nuestros recuerdos para funcionar más rápidamente y que no nos bloqueemos. Sueños buenos. 


Scrolling After Sex se puede abrir por donde quieras. Y cualquier frase te hará sonreír, asentir o reflexionar en el pasado pisado. Al menos, seguro, a los contemporáneos del texto. 

"Mujer: Infinito". El libro de Leticia es un tomo feminista que nos habla de amor cotidiano y aeropuertos pequeños. "Todo lo que decidió no conocer le duele hoy mucho. Sabe que cualquier decisión implica un millón de renuncias."

Scrolling After Sex es un volumen de realidades en una existencia con inseguridades y belleza.

Como Leticia y yo compartimos sensibilidad y sabemos que todo lo que se ha escrito o ya ha pasado o pasará, deseo que nunca dejes de escribir y que pronto piquemos a cuatro manos.

"El amor de verdad es luz." Como aquella actriz francesa encima de la moto. 


 Y ya está.

8 de març

Recordo l'olor de xocolata desfeta que feia la mare els diumenges. A la Meritxell i al pare els hi encantava. 

Saber-me dona és una responsabilitat que he volgut defugir sovint. És una existència arriscada. 

Estimar una dona ha estat el més veritable.

Lengua apolítica, lenguas abruptas. 

Crecer rodeada de convenciones. Y el ruido de alguien en la cocina.